La falta de equilibrio en nuestras commidas genera consecuencias indeseadas cuando se trata de bajar de peso. No tener un control ni llevar una planificación de nuestra dieta es casi tan contraproducente como ingerir elevadas cantidades de alimentos grasos.
Caldo de huevo para bajar de peso: cómo prepararlo y qué otros beneficios ofrece a la saludPara revertir estas consecuencias y, sobre todo, los efectos rebote, es importante consultar con un especialista que pueda adaptar cualquier dieta a las necesidades de nuestro organismo. En las recomendaciones para consumir en el día a día también es útil incluir alimentos que no favorezcan la inflamación abdominal.
Nutrientes que retienen y eliminan líquido
Los alimentos contienen algunos compuestos que favorecen la retención de líquidos. El sodio es ejemplo de ellos y su función es guardar agua en el cuerpo evitando que escape facilmente. Como contrapartida, el potasio es el alimento que favorece la eliminación de líquidos.
Armar una dieta con la cantidad justa de potasio y con bajos niveles de sodio puede prevenir la retención de líquidos y, por lo tanto, la inflamación. Este menú puede consumirse algunas veces en la semana para contribuir a la pérdida de peso.
Menú diurético para bajar de peso
Las comidas de todo un día pueden organizarse con tal de conseguir un objetivo particular. Consumir la cantidad recomendada de agua por día también es importante si se aplican estas comidas a la rutina. La dietista Lluca Rullán recomienda estos alimentos para una jornada completa:
Desayuno. Pudin de chía hidratada con trocitos de durazno y avellanas picadas.
Almuerzo. Ensalada de garbanzos con tomate y apio. Paella de mariscos con verduras.
Postre. Una rodaja de sandía.
Merienda. Un vaso de yogur con arándanos, banana y sésamo previamente molido.
Cena. Ensalada de lechuga con ananá. Hamburguesa de ternera. Un durazno.
La ensalada del almuerzo se puede reemplazar por otra ensalada de lentejas, espinaca, tomate, queso fresco y semillas.